Cáncer

La cúspide Géminis-Cáncer es una superposición y mezcla del tercer signo del zodíaco, Géminis, con el cuarto, Cáncer. Esta cúspide se puede comparar simbólicamente con el período alrededor de los veintiún años en la vida de una persona y marca literalmente el comienzo del verano en el hemisferio norte. Se puede considerar que la cúspide Géminis-Cáncer representa la magia. Durante esta época del año, muchas plantas se muestran exuberantes y en plena floración.

Los días se alargan, alcanzan su punto máximo, y alrededor del 21 de junio (solsticio de verano) se produce el día más largo y la noche más corta del año. Esta es la época mágica de la Nochebuena de San Juan (24 de junio), una noche cálida y encantada, llena de perfumes y sonidos mágicos en la que ocurren acontecimientos sobrenaturales. En el desarrollo humano, la edad de veintiún años marca el final de la adolescencia y el comienzo de la edad adulta. La magia juega un papel importante en este período, especialmente en términos del poder magnético del amor y el encanto del romance. El joven adulto experimenta un asombro casi infantil ante la belleza del mundo y los horizontes mágicos que se abren ante él.

Los nacidos en la mágica cúspide del solsticio de verano pronto caen en la seducción del encantamiento. Románticos e inspirados, los nacidos bajo Géminis-Cáncer suelen poner sus talentos y energía al servicio de elevados propósitos, ya sean causas familiares, religiosas, filosóficas, artísticas, políticas o sociales. Cuando se entregan en cuerpo y alma a actividades devocionales, los nacidos en esta cúspide a menudo parecen dóciles, incluso modestos. Para muchas de estas personas, permanecer en el anonimato es un objetivo en cualquier carrera que sigan. Hay, sin embargo, representantes de Géminis-Cáncer más agresivos que se vuelven asertivos cuando maduran y no tienen problemas para dejar que el mundo sepa cómo son.

Fáciles de seducir, los nacidos bajo Géminis-Cáncer también pueden encantar a los demás, consciente o inconscientemente; Estos individuos seductores pueden tener un encanto dulce e inocente. Deben intentar no dejar que los demás se impongan, pero en general tienen buenos instintos defensivos y en el ámbito emocional, incluso los más amables establecen con delicadeza normas que no deben ser superadas. Los más agresivos suelen ser conscientes de su poder de persuasión, que pueden utilizar sin escrúpulos para conseguir lo que quieren, incluso cuando otros individuos resultan heridos en el proceso.

Aunque encantadores y atractivos, los nacidos bajo Géminis-Cáncer pueden ser increíblemente fríos. Tienen una objetividad utilitaria y su capacidad de razonamiento crea un contraste eficaz con sus emociones profundas. Influenciados por Géminis y Cáncer, de hecho, son una interesante mezcla de lógica y sentimiento. Cuando los nacidos en esta cúspide apelan a las emociones de los demás, lo hacen de manera imparcial y afectuosa. No se enojan fácilmente e inspiran confianza debido a su amabilidad, preocupación y disposición para ayudar. Las personas nacidas en el solsticio de verano entran y se anidan en los corazones de sus seres queridos y son reacias a abandonar su posición, incluso cuando la separación resulta necesaria.

Los Géminis-Cáncer tienden a ser personas individualistas que no dan fácil acceso a su mundo interior. A menudo les va mejor cuando pueden trabajar desde casa y, a menudo, su hogar es una especie de retiro o santuario. Que se les permita compartir el espacio donde viven los Géminis-Cáncer implica una gran confianza y respeto. Una invitación a visitar a estas personas tan personales se siente más a menudo como un verdadero regalo o un reflejo del deseo de compartir, que como un signo de ostentación o de necesidad de socializar.